COMENTARIO A TIEMPO
Por Teodoro Rentería Arróyave
Para miércoles 20 de junio de 2018
SEGUNDA Y ÚLTIMA PARTE
Más que el compromiso personal, el social es el que distingue a los seres humanos, porque la lucha es por el bien común de una comunidad, de un país o de la humanidad toda.
Por el contrario, el burocratismo, no nos referimos a la burocracia que nos merece todo nuestro respeto, sino a esos grupúsculos que se incrustan en la cosa pública para medrar y beneficiarse en detrimento de las sociedades.
Don Saúl Uribe Ahuja, que podría vivir a sus 90 años, recién cumplidos, en la comunidad de sus éxitos profesionales, sigue en la lucha por los suyos, no obstante, como ya lo dijimos, que desde hace más de 6 años por una operación de carótida y dos embolias se ve en la necesidad de usar la silla de ruedas y de asistencia personal.
Baste mencionar una sola tarea de las muchas que se ha impuesto, ejemplar por todos conceptos: su defensa no sólo de la conservación sino de su uso mismo de la obra más importante del Siglo XVI en toda América, nos referimos al Acueducto Tembleque, que con 137 arcos, puentes, arquería mayor de un kilómetro y derivaciones, hicieron correr el agua por más de 50 kilómetros de Zempoala, Hidalgo a Otumba, Estado de México mediante una elevación de 39 metros.
La denuncia legal y pública de Don Saúl, habla por sí mismo de su compromiso social. He recurrido a todos los funcionarios locales, estatales, nacionales e internacionales sin obtener respuesta alguna.
“A pesar de las generosas disposiciones de personajes e instituciones -afirma en un escrito-, hace años que el Acueducto está impedido de funcionar porque manos criminales destruyeron la mampostería medieval de casi 500 años y la conexión del Acueducto para robar el agua”, lo cual como es obvio impide que funcione. Precisa: “Roban el agua desde los manantiales de Tecajete a la embocadura del Acueducto.
Todo esto ocurre después de que en 20 años de trabajo, se logró el apoyo de un millón de dólares de la Embajada de Estados Unidos, para la investigación, que incluyó el recabar los planos y antecedentes y la dignificación de la magna obra.
Con todo ello, también como ya lo apuntamos, el 5 de julio de 2015, en Bonn, Alemania, el Patronato que preside, logró que la UNESCO, declarara el Acueducto Tembleque “Patrimonio de la Humanidad”, es el más grande y el más alto del mundo que se conserva.
El dictamen del organismo mundial asegura en su acuerdo, que el Acueducto Tembleque es “Un Valor Universal Excepcional. Ejemplo Sobresaliente de Conducción de Aguas en las Américas. Combinando la Tradición mestiza con la Tradición Hidráulica Romana.
Intercambio Humano que la Creo. Fusionado por los Ideales Humanistas. Tradiciones Colectivas Locales. El Puente de Tepeyahualco es Una Obra Maestra Arquitectónica con la Integración de la más Alta Arcada de un solo Nivel Jamás Construido en los Acueductos de la Época Romana a Mediados del Siglo XVI”.
Todo ese portento de obra yace inservible por los ladrones de agua y por la negligencia criminal del burocratismo. Ésta, es una más de las luchas de nuestro personaje, el abogado y humanista, Saúl Uribe Ahuja. En otras palabras, es la batalla diaria del compromiso social contra el burocratismo.
Periodista y escritor; Presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE; Secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; Presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana y Académico de Número de la Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG. Agradeceré sus comentarios y críticas en teodoro@libertas.com.mx, teodororenteriaa@gmail.comNos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.org, y www.clubprimeraplana.org